Para potenciar el trabajo colaborativo, es fundamental reconocer que los miembros de un grupo no siempre comparten o reconocen la información disponible.
Esto ocurre porque cada persona percibe y comparte ciertos aspectos, quedando ocultos otros. Hay cuestiones que pueden ser evidentes para nosotros, pero no para otros, y viceversa.
Mediante el uso de la ventana de Johari podremos clarificar esta comprensión, haciendo de la colaboración y el intercambio un camino más efectivo. Descubre aquí una forma rápida de aprovecharte de esta metodología para potenciar tu trabajo.
Creditos: https://redextensionrural.blogspot.com/2024/04/como-potenciar-el-trabajo-colaborativo.html
La Ventana de Johari es una herramienta de psicología cognitiva creada por los psicólogos Joseph Luft y Harrington Ingham (las primeras letras de sus nombres forman el acrónimo Johari). Esta ventana sirve para mostrarnos los procesos de interacción humana. Ilustran el proceso de comunicación en un grupo y las dinámicas de las relaciones entre los participantes.
La ventana puedes ser usada para entender que ocurre cuando fluye la información entre los participantes, al momento de la exposición y la retroalimentación. Esta idea implica el reconocimiento de que, en los procesos de comunicación grupal, existen dos fuentes: “los otros” y “yo”, y que, como no todos conocemos todo, hay elementos que pueden ser claros y visibles desde nuestra óptica y otros que no. De igual forma, también puede ocurrir lo mismo en los demás participantes.
En la gráfica hemos ilustrado los cuatro cuadrantes de la ventana de Johari que quedan determinados por el punto de vista del observador. “lo que vemos nosotros” y “lo que ven los demás”. A su vez, desde la mirada de cada observador, pueden existir situaciones o conceptos que le resulten “conocidos” o “ignorados” a cada uno.
Así, según esta combinación de sujetos (punto de vista) y reconocimientos (conocido / ignorado), se generan cuatro cuadrantes que nos dan la base para transformar esta caracterización en opciones que mejorarán el desempeño grupal.
Veamos que contiene cada cuadrante de la ventana de Johari:
ABIERTO
En este cuadrante está la parte consciente de nosotros -nuestras actitudes, comportamiento, motivación, valores, forma de vida- de la que somos conscientes y que también es conocida por los demás. Nos movemos dentro de esta zona con libertad. Aquí somos como "libros abiertos". Para nosotros y para los demás.
OCULTO
En este cuadrante está las cosas que son conocidas para nosotros, pero que los demás participantes desconocen. Aquí podemos encontrar los adjetivos con los que nos autodefinimos, pero que no pueden usar los demás, porque no conocen de nosotros. Son personales.
CIEGO
A diferencia del cuadrante anterior, aquí está todo lo que los demás perciben o conocen de nosotros, pero que nosotros no conocemos. Representan lo que otros perciben de nosotros, pero no nos lo dicen. Los adjetivos que pueden ocupar este lugar operan como “etiquetas” que los demás ponen “en nuestras” espaldas, y que nosotros no podemos leer.
DESCONOCIDO
En este cuadrante se ubican los aspectos que son desconocidos para nosotros y para los demás. Si los aplicamos como adjetivos, los mismos representarían o motivos de los sujetos, que nadie que participa reconoce, ya sea porque no se aplican o por ignorancia colectiva de estos rasgos.
Definida la matriz y los componentes que la integran, ahora podemos ensayar un uso proactivo de la misma, como herramienta que nos permita mejorar el desempeño grupal. La ventana nos ofrece una oportunidad para reconocer los flujos y contenidos de comunicación en el grupo. Identifica puntos críticos para mejorar el desempeño colaborativo. Adoptando este enfoque, con un uso ágil, colaborativo y estratégico, las organizaciones podrán impulsar procesos de innovación y obtener ventajas competitivas significativas.
¿Como aplicar esta herramienta en un grupo?
Para poder capturar las ventajas que ofrece la ventana de Johari en el trabajo colaborativo podemos seguir la siguiente secuencia de pasos. Los mismo se han desarrollado a título ilustrativo, como una guía básica. Luego, cada profesional deberá adaptarlos a las circunstancia, temáticas y características de los grupos donde desee aplicarlos.
Paso 1: Introduce la propuesta
Este primer paso es para permitir que los participantes se familiaricen con la propuesta de la ventana de Johari, y reconozcan la importancia de conocer cómo opera la comunicación y la colaboración entre ellos. Para cumplir este objetivo se puede hacer una breve presentación de la herramienta, explicando los cuadrantes y como operan en los grupos de trabajo. Te proponemos usar la gráfica que aquí ofrecemos y los conceptos básicos que encuentras en la introducción de este material. ¡Aprovéchalos!
En esta etapa, también será necesario plantear la idea central del ejercicio que se realizará y los alcances. La tarea consistirá en una explicitación de las percepciones de cada participante en su comportamiento vincular dentro del grupo, y el alcance será una estrategia para mejorar el desempeño comunicacional entre los miembros.
Paso 2: Preparar el material de trabajo grupal.
Este primer paso servirá para que cada miembro pueda graficar su situación en el grupo mediante la definición de su propia ventana. Cada integrante que participe del proceso deberá identificar gráficamente las dimensiones de los cuadrantes de su ventana en una hoja de papel donde la deberá dibujar con un lápiz o bolígrafo. Para lograrlo, quien conduzca el ejercicio, primero deberá tener claro los conceptos básicos de la ventana de Johari que están detallados arriba, y deberá consignar al grupo participante, los siguientes pasos que servirán para preparar el material de trabajo:
Dibuja un cuadrado grande en la hoja;
Coloca un número 0 (cero) en el ángulo superior izquierdo del cuadrado; c- coloca un número 100 (cien) en el ángulo inferior izquierdo del cuadrado, y otro número 100 en el ángulo superior derecho del cuadrado. Estos números operarán como “escalas”, para movernos con nuestras decisiones sobre las aristas izquierda y superior del cuadrado. Si lo deseas como guía coloca el número 50 a la mitad de cada escala.
Sobre la arista superior del cuadrado (por fuera del cuadro) escribe la siguiente pregunta: ¿Cuánto me importa lo que los demás digan de mí?
Sobre la arista vertical izquierda del cuadro (por fuera del cuadro) escribe la siguiente pregunta: ¿Cuánto me animo yo a decir lo que pienso?
Te dejo un gráfico ilustrativo de como debería quedar la hoja de trabajo para cada participante. Si tienes poco tiempo y eres considerado y organizado, puedes preparar estos materiales de antemano, y solo distribuirlo a cada participante para acelerar el proceso.
Paso 3: Caracterizar la percepción de los participantes.
En esta etapa cada participante genera de manera individual su grafica a partir de las indicaciones que figuran más abajo. Es importante consignar que la sinceridad sea un valor central al momento de graficar, de lo contrario el trabajo no servirá para el grupo. La madurez del grupo se mostrará aquí con toda claridad. Esto solo sirve si hay una clara convicción de entender el funcionamiento de la comunicación grupal. También es importante aclarar (reiteradamente si es necesario) que el dibujo solo operará para describir la ventana de cada uno para esta situación grupal. NO define a la persona en sí, define a la persona en el comportamiento de este grupo. Procede a consignar a cada participante los siguientes pasos:
Marca un punto en la escala de 0 a 100 sobre la arista superior del cuadro que refleje el valor entre 0 a 100 respecto de la pregunta ¿Cuánto me importa lo que los demás digan de mí? Recuérdales ser sinceros al marcar el punto y reflejar el dato solo en referencia a este grupo u organización. No olvides decirles que, si marcan 50, será una mentira especulativa para quedar bien, esto los obligará a ser más precisos.
Marca un punto en la escala de 0 a 100 sobre la arista lateral izquierda del cuadro, que refleje el valor entre 0 a 100 respecto de la pregunta ¿Cuánto me animo yo a decir lo que pienso? Reitera las condiciones dichas en el punto a-
Indica a los participantes que, naciendo en el punto definido en cada lateral en el paso a- y b-, prolonguen una línea hasta la arista opuesta del cuadro, generando así los cuatro cuadrantes. Te dejo debajo algunos gráficos de posibles opciones solo a título ilustrativo. Las imágenes de las proporciones de los recuadros, serán tan variables como la cantidad de participantes.
Paso 4: Compartir las gráficas para la reflexión.
Antes de compartir las resoluciones de las ventanas de cada participante, deberemos solicitar que “nombren” dentro de sus gráficas los cuadrantes según la ubicación indicada en la imagen inicial: ABIERTO, OCULTO, CIEGO, DESCONOCIDO.
Cada gráfica estará aportando información de valor para mejorar la comunicación en el grupo. Podemos comparar diferencias, pero por sobre todo entender como valorar las proporciones de los cuadrantes en las diferentes ventanas para desandar la mejora. Esta tarea de reflexión será individual y grupal. Habrá que animar al grupo a encontrar caminos para expresar las opiniones. Explicando cada uno porqué lo define de esa manera, y permitiendo que cada uno de los otros participantes aporte su visión sobre la imagen de la persona que la presenta. Esta primera acción permitirá al grupo ingresar en el ámbito de mejora de su comunicación estratégica.
Una vez hecho el intercambio y los comentarios entre los participantes podrán ensayar opciones para mejorar las “proporciones” que adquieren cada cuadrante, para cada participante. La clave del análisis está en considerar las variaciones en las proporciones que existen en los cuadrantes de los gráficos de los participantes. Las diferencias serán el punto de análisis para entender los cambios a generar.
La lógica será orientar a cada miembro para que encuentre, dentro del grupo, los caminos para ampliar lo más posible el cuadrante ABIERTO. Este cuadrante cuanto más grande es, estará indicando que esa persona tiene desarrollada la capacidad de ESCUCHA ACTIVA, dado que como le interesa (le importa) lo que los demás opinan de él, desarrolla esa capacidad. Por otro lado, también indicará que tiene desarrollada la capacidad de EXPRESION GENUINA, dado que, al animarse a decir sus opiniones, lo que piensa, permite que los demás integrantes lo conozcan y tenga reducida los aspectos ocultos que interfieran con el desempeño grupal.
Este paso puede llevar bastante tiempo en su desarrollo. Cuando se usa adecuadamente, el tiempo no es una limitante, porque al compenetrarse en el análisis de las respuestas obtenidas a las preguntas que están en los ejes, cada participante va gestando su imaginario de cambio sobre aquellos aspectos que le resulten crítico en su comportamiento grupal. Incluso diría que puedes ser una estrategia interesante, dejar “reposar” el análisis un tiempo y volver a retomarlo en otros encuentros. Esto ayudará a cada uno en la reflexión individual y en el diseño de su cambio personal para con el grupo.
¿Cómo capitalizar las ventajas de la herramienta ventana de Johari?
El uso de la ventana de Johari no solo ayuda a los miembros del grupo a entenderse mejor entre ellos y a mejorar la comunicación, sino que también fomenta un ambiente de mayor confianza y colaboración. Al reducir las barreras de información y percepción, el grupo puede lograr una sinergia más efectiva y un desempeño mejorado.
El centro de atención para capitalizar la herramienta debe estar puesto en entender en primer lugar, tanto individualmente como grupalmente, cuales son las barreras que reducen la ESCUCHA ACTIVA. Es decir, ¿por qué no importa, o no está desarrollada la capacidad de preocupación entorno a la opinión de los demás sobre el comportamiento grupal de uno o varios de sus miembros?
En segundo lugar, para capitalizar las ventajas, debemos reconocer cuales son las barreras para abrirse frente a los demás, poder EXPRESAR GENUINAMENTE las opiniones o reflexiones sobre determinados temas o situaciones propias de la organización. Es decir, ¿por qué los miembros no se animan a decir lo que piensan?
La mejora de la comunicación estratégica en una organización ingresa por el “yo libre”, por el cuadrante ABIERTO. Cuando las organizaciones descubren y cultivan este espacio, sus miembros se mueven con libertad. La organización opera en modo “consciente”. Las actitudes, comportamientos, motivaciones, valores, formas de ver la vida, etc. de todos está sobre “la mesa”. No habrá sorpresas sobre los comportamientos de sus miembros. Así las energías grupales estarán orientadas hacia los objetivos que los reúnen.
Espero ansioso saber tu opinión sobre el tema, y si logras usar la herramienta, conocer tu experiencia y tus aprendizajes para compartir con otros.
Referencias
Wikipedia Ventana de Johari https://es.wikipedia.org/wiki/Ventana_de_Johari
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